lunes, 22 de agosto de 2011

El camino de la soledad


San Juan de la Cruz subraya la importancia de la soledad para la búsqueda de Dios, para la comunicación con Dios:

“En soledad vivía,
y en soledad ha puesto ya su nido,
y en soledad la guía
a solas su querido”.
(CÁNTICO ESPIRITUAL)


Las palabras del carmelita a veces son crípticas, difíciles de entender. Como cuando anota en la SUBIDA DEL MONTE CARMELO - MONTE DE PERFECCIÓN -:


“Para venir a gustarlo todo,
no quieras tener gusto en nada.
Para venir a saberlo todo,
no quieras saber algo en nada.
Para venir a poseerlo todo,
no quieras poseer algo en nada.
Para venir a serlo todo,
no quieras ser algo en nada.

Para venir a lo que gustas
has de ir por donde no gustas.
Para venir a lo que no sabes,
has de ir por donde no sabes.
Para venir a poseer lo que no posees,
has de ir por donde no posees.
Para venir a lo que no eres,
has de ir por donde no eres.

Cuando reparas en algo
dejas de arrojarte al todo.
Para venir del todo al todo,
has de dejarte del todo en todo.
Y cuando lo vengas del todo a tener
has de tenerlo sin nada querer.

[...]

Ya por aquí no hay camino,
porque para el justo no hay ley;
él para sí se es ley”.
(cf. 1 Tim. I, 9 y Rom. II, 14)


Palabras escritas en la soledad, para ser leídas en la soledad, para ser comprendidas en la soledad:

“Era la ciencia perfecta,
en profunda soledad
entendida, vía recta;
era cosa tan secreta,
que me quedé balbuciendo,
toda ciencia trascendiendo”.
(COPLAS HECHAS SOBRE UN ÉXTASIS DE HARTA CONTEMPLACIÓN)


Ahí, en la soledad, Dios nos hablará de cosas secretas, Dios nos guiará para llegar a saber lo que no sabemos, para llegar a poseer lo que no poseemos, para llegar a gustarlo todo. Para llegar a serlo todo.


6 comentarios:

  1. Me parece extraordinario y me siento identificado con ello en la medida en que lo vivo, y me siento
    esperanzado por ello en la medida de la intensidad con que lo espero, y me siento bendecido por ello, en la medida en que por ello renuncio a mi deseo.
    Querido Caminante, mi mail es: joanemili.gonzalez@gmail.com
    y me pongo a tu disposición para compartir experiencias del Camino.
    Para conocerme mejor, te remito a poesia.cat o, simplemente, busca Joan Emili González Pérez en Google y ahí encontraràs todos los poemas que he escrito sobre el Camino de Retorno.
    Recibe mi más cordial saludo.
    Joan Emili

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  2. Hola, Joan Emili.
    Gracias por leer el blog, por tus palabras, por el enlace a las preciosas poesías, y por la dirección de correo electrónico, que tendré en cuenta.
    Estaremos en contacto.
    Un abrazo, amigo.

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    1. Hola Caminante, hace algunos días te mandé un verso "El Caminante del Alba" que se me da que tiene afinidad contigo, pero como no tengo noticias tuyas al respecto, debo dudar de que lo hayas recibido. Espero tus noticias al respecto.
      Te envio un abrazo con mucho afecto.
      Joan Emili

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  3. Hola, Joan Emili. Me alegro mucho de volver a saber de ti.
    No, ciertamente no lo recibí (¿a dónde lo enviaste?) Si quieres volverlo a enviar, estupendo. No dudes que, si lo recibo, te contestaré.
    Y, en cualquier caso, pásate de vez en cuando por este blog, que es el tuyo, y comenta, si te apetece.
    Escribir en internet es como echar al mar una botella con un mensaje...
    Un abrazo, Joan Emili.

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    1. Hola caminante, va por ti:

      El caminante del alba (1980)

      Llevo un manojo de estrellas
      en la palma de la mano
      con las que siembro la tierra
      por la que huella mi paso.

      I así voy andando el camino
      que esquiva a los caminantes,
      si no te escoge el destino
      no es posible que lo andes.

      Dos estrellas en mis ojos
      son guías en mi jornada,
      una me quiere de hinojos,
      la otra me dice: Anda!

      Estrella estrellita blanca!
      ¿Quién te quiere como yo?
      ¿Quién te echaria en falta
      si le dijeras adiós
      con el mismo desespero
      que si le otorgas tu amor?

      Pero mi senda no acaba
      por tu blanco resplandor,
      plata contra negra noche,
      prisión de mi corazón,
      amante sin un reproche,
      cómplice de mi evasión,
      primera claridad del alba
      culpable de mi desazón,
      que me condena o me salva...
      esperanza o desesperación...
      Eres la luz de mi alma
      que despierta a la visión!

      Mas sigo andando el camino
      que se oculta al caminante
      si no me elige el destino
      no es posible que lo ande.

      Camino de luz de plata
      te esfumas bajo mi pie,
      tu destino me arrebata
      como vientre de mujer
      que desde adentro me exclama:



      “Para que cambie tu suerte,
      debes fundirte en mi llama,
      has de ofrecerme tu muerte
      y yo te haré renacer,
      y sabe desde este instante
      que eres mi hijo y mi amante,
      y mi caballero andante...
      mi única otra mitad
      por toda la eternidad.

      “Penetra confiado en mi seno,
      para que te vuelva a engendrar,
      para que renazcas divino
      de mi vientre maternal.

      “Vientre negro cual la noche
      que apagará tu mirada...
      mas te salvará por siempre
      del peligro de la nada.

      “Y surcada por el trueno
      que retumba sin cesar,
      cubriendo mi oscuro seno
      el verbo me fecundará.

      “Y una vez te haya alumbrado
      nuevo Fénix inmortal,
      con gran cortejo divino
      a la fiesta asistirás
      de tu Matrimonio eterno
      con tu Novia celestial.

      “Y ante las puertas del Cielo
      el Padre nos acogerá
      y estrechándote en sus brazos
      dirá con solemnidad:

      “‘Bienvenido el que regresa
      tras su largo caminar,
      guiado por su fiel Estrella
      a su Padre y a su hogar.

      “’En tu paso por la tierra
      ganaste la libertad,
      derrotando en lucha fiera
      al demonio y a la muerte,
      y por tu limpia victoria
      esta será tu suerte:


      “’Yo te concedo la Gloria,
      del Grial Caballero serás
      y como cumple a mis héroes,
      no morirás jamás’”.

      Y cual caballero andante
      seguiré andando el camino
      que se oculta al caminante
      si no es por Amor divino
      no es posible que lo ande,
      ni aunque lo quiera el destino.

      Llevo un manojo de estrellas
      en la palma de la mano
      con las que siembro el camino
      para cada nuevo hermano
      que quiera ser peregrino
      del despertar humano.

      Y contra cualquier tirano,
      ya sea humano o divino,
      ya sea el mismo destino,
      esgrimo la espada del Verbo
      que me ha dado el mismo Dios
      para defender a aquellos
      que son hijos de su Amor,
      hasta que despierten salvos
      el dia de Resurrección.



      Joan Emili González Pérez

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  4. Es muy bonito, Joan Emili. Me ha gustado mucho, sí. Me alegro de que quede incorporado aquí. Muchas gracias, y... a caminar...

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